Al igual que nuestros perros, los gatos tienen ciertas patologías a las que son propensos y de las que los dueños debemos estar al tanto con el fin de prevenir si es posible o tratar de ser necesario. En el caso de los mininos una de las afecciones más graves que podemos enfrentar es la Leucemia Felina. Pero qué es realmente esta enfermedad? Cómo podemos evitarla y diagnosticarla?
En este artículo responderemos todas las preguntas que tengas con respecto a ella para que puedas conocerla, detectarla y combatirla.
Tabla de contenido
- 1 ¿Qué es la Leucemia Felina?
- 2 ¿Cómo se transmite la Leucemia Felina?
- 3 ¿Puede la Leucemia Felina afectar a humanos o perros?
- 4 Síntomas de la Leucemia Felina
- 5 ¿Qué sucede cuando un gato negativo entra en contacto con el virus?
- 6 ¿Siempre es mortal la Leucemia Felina?
- 7 ¿De qué manera se diagnostica el virus?
- 8 ¿Cómo proteger a mi gato de la Leucemia Felina?
¿Qué es la Leucemia Felina?
La Leucemia Felina (VLFe por sus siglas) es un retrovirus que ataca el sistema inmunológico y afecta el ADN del gato agregando su información a la de los genes integrándose en las células. El virus fue aislado en los años 60 y afecta a la población felina en general tanto a gatos domésticos como a los salvajes así como especies de grandes felinos. Funciona en el organismo del gato como una especie de cáncer que afecta los leucocitos, glóbulos blancos que son los encargados de defender el organismo de infecciones. Ésto hace que el felino tenga un sistema inmune sumamente débil y esté propenso a complicarse gravemente con cualquier enfermedad que sobrevenga a la leucemia. Ésto hace que éste virus sea considerado grave al ser adquirido por nuestra mascota. Algunos gatos poseen activos los anticuerpos de leucemia sin resultar positivos, lo que quiere decir que en algún momento resultaron infectados pero el cuerpo tuvo los medios para combatir la infección.
¿Cómo se transmite la Leucemia Felina?
A diferencia de otras enfermedades como la Toxopasmosis, en ésta particular el gato infectado si es portador del gen, lo que hace que el contagio se de directamente de un gato infectado a otro. Éste contagio se puede producir a través de la saliva y secreciones corporales, por ejemplo si un minino infectado muerde a otro o si comen del mismo plato; a través del contacto sexual y puede ser transmitido de la madre a los cachorros durante el embarazo o durante la lactancia. El contacto entre un gato positivo y uno negativo debe ser continuo por un período considerable de tiempo para el contagio se haga de manera efectiva ya que el virus es bastante débil y de inactiva una vez liberado en el ambiente; esta fragilidad hace altamente improbable que el gato pueda resultar infectado en clínicas veterinarias o guarderías.
¿Puede la Leucemia Felina afectar a humanos o perros?
Múltiples estudios epidemiológicos se han llevado a cabo con la idea de verificar la posibilidad de que otras especies puedan adquirir éste virus, sin embargo, se ha comprobado ampliamente que la transmisión de gatos a humanos o a otros animales es imposible, éste virus es único de la especie felina, por ende, tanto nosotros como nuestros perros están a salvo de ser contagiados, de hecho, pareciera que la especie canina no tiene hasta ahora ninguna enfermedad inmunológica parecida a la VLFe.
Síntomas de la Leucemia Felina
Algunos gatos pueden no presentar ningún síntoma de la presencia del virus en el sistema, en otros casos, lo que hace la leucemia es exacerbar otros padecimientos crónicos; sin embargo, se pueden presentar algunos de los siguientes síntomas en nuestra mascota ante los que debemos estar muy pendientes:
- Fiebre
- Inapetencia
- Desgano
- Problemas de piel
- Enfermedades dentales
- Convulsiones
Por otra parte se pueden presentar otros problemas acelerados por la presencia de infecciones que no pueden ser controladas por el sistema inmunológico del animal como por ejemplo:
- Infecciones renales o respiratorias
- Trastornos neurológicos
- Enfermedades en la sangre
- Linfomas
¿Qué sucede cuando un gato negativo entra en contacto con el virus?
El contagio de la Leucemia Felina no es tan sencillo como quizás puedas creer, de hecho, hay muchas ocasiones en las que el sistema inmune del gato ataca la infección y se hace resistente a ella, esto puede depender de muchas cosas como por ejemplo la edad y el estado des sistema inmune del gato, el tipo de cepa del virus y el tipo de exposición que se presenta. Algunos gatos adquieren la enfermedad pero no desarrollan el virus, lo que los convierte en portadores asintomáticos capaces de transmitir la enfermedad y en otros casos, se presentan los síntomas.
Al ser positivo el gato puede desarrollar entonces los siguientes escenarios:
- Se presenta la viremia persistente causada por la entrada de la infección al torrente sanguíneo debilitando el sistema inmune del gato. (Éste es el punto más importante en el que nuestra mascota debe recibir tratamiento, lo que le dará un alto porcentaje de probabilidad de sobrevivir)
- La médula ósea resulta infectada, ésta es la parte más crítica pues a partir de aquí el virus quedará registrado en la información genética del animal de por vida.
- El virus se replica en las células salivales, epiteliales, estómago, esófago, intestinos, tráquea y otros.
¿Siempre es mortal la Leucemia Felina?
No, este virus afecta al gato más o menos de la misma manera en la que el VIH afecta al humano. Aunque es evidente que será la causa de su muerte, no quiere decir que es una automática sentencia. Es posible que un gato que presente la infección latente (asintomática) viva por varios años siempre y cuando esté en constante tratamiento veterinario para prevenir que lo conocido como «enfermedades oportunistas» puedan aprovecharse de la inmunodeficiencia del animal y caucen daños. Nuestro gato puede vivir tranquilo si tomamos medidas como mantener un estricto control veterinario y una convivencia libre de estrés y circunstancias que puedan causar otros padecimientos que con un sistema inmune debilitado, podrían afectar seriamente su salud.
¿De qué manera se diagnostica el virus?
Es de suma importancia que tengamos en cuenta que solo un Médico Veterinario debe hacer el diagnóstico y subsecuente tratamiento. Hay varias pruebas que pueden aplicarse a nuestros gatos para descartar la presencia del la Leucemia Felina, éstas son:
- ELISA: es una prueba de sangre de inmunoabsorción enzimática. Es el más común de los examenes y detecta los antígenos en la sangre lo que significa que determina el inicio de la infección, éste test no revela si se trata de una infección que el sistema inmune pueda vencer o no por lo que es importante hacer otra prueba luego de varias semanas para comprobar si el organismo del animal pudo vencer al virus o no.
- IFA: este test detecta la presencia del virus en su estado de infección irreversible por lo que no sirve para detectar los primeros estadios de la enfermedad. Se puede realizar para confirmar los resultados del ELISA.
- PCR: este análisis reconoce el virus cuando está ya anclado al ADN de la célula, se puede hacer en sangre, muestras de médula ósea u otros tejidos. Es excelente para detectar el virus latente cuando no no hay sintomatología presente.
¿Cómo proteger a mi gato de la Leucemia Felina?
La vacuna contra la Leucemia está disponible así que este es un gran primer paso para proteger a tu minino, teniendo al día esta vacuna el organismo adquiere la posibilidad de que ésta ayude al sistema inmunológico del gato a luchar el virus en caso de que se tenga contacto con la cepa.
Si tu gato no tiene contacto con el exterior, por ejemplo si vives en apartamento, el riesgo de que contraiga el virus es prácticamente nulo, pero si tienes patio o tu gato tiene la libertad y la costumbre se salirse, la aplicación de la vacuna se hace absolutamente necesaria.
Si ya tienes un gato en casa y decides llevar uno más, asegúrate de hacerle a éste las pruebas para descartar la presencia del virus, de esa manera estarás protegiendo a tu primera mascota de ser contagiado.