En este artículo te mostramos todos los alimentos que no debes darle a tu perro. Todos alguna vez lo hemos hecho, no debemos engañarnos. Todos le hemos dado huesos a nuestra mascota o Ibuprofeno cuando vemos que le duele algo, como si fuera una persona. Aunque en ocasiones parezcan más humanos que muchas personas, siguen siendo perros y hay que vigilar qué le damos.
Tabla de contenido
¿Cuáles son los alimentos que no debes darle a tu perro.?
1. Huesos que se astillan
“¡Yo le doy huesos a mi perro y no le pasa nada!” Esto depende del hueso. Hay huesos que se astillan fácilmente, entre ellos se encuentran los de conejo y de pollo, y hay que evitarlos a toda costa.
Hay que evitar totalmente ofrecerle los huesos de pequeño tamaño o aquellos que se astillan al romperse, ya que se pueden clavar en su garganta y puede causar una perforación de estómago o intestinal e, inclusive provocar la muerte.
Si no puedes evitar darle huesos, entonces proporcionales los huesos redondos de res, como los de rodilla y cadera, o con trozos de huesos largos como el tuétano que le sirven de juguete y le fortalecen y limpian los dientes.
2. Restos de comida
Tu perro no es tonto, si pudiera hablarte te diría que la comida estuvo riquísima, no hay más que ver la manera en que babea… pero la verdad es que los restos de comida no son saludables para ellos; piensa primeramente en tu masa corporal y en la de tu perro, posiblemente le superes en peso. A ti la grasa de esa comida no te va a saturar las arterias (a menos que abuses), pero a tu amigo perruno de cuatro patas puede provocarle serios problemas de obesidad, y esto implica muchos riesgos para su salud, como trastornos cardíacos y renales.
La comida para humanos suele contener una elevada cantidad de grasa, por lo que puede causarle una pancreatitis. Asimismo, los condimentos que normalmente llevan algunas comidas pueden causarle severas úlceras, gastroenteritis, colitis, etcétera. Por ello, fíjate bien en los alimentos que no debes darle a tu perro.
3. Chocolate
¿Quién no ha visto una barra de chocolate y le ha provocado de inmediato? Tranquilo, a tu perro también le pasa.
El chocolate sin duda alguna enloquece a la gran mayoría de los perros y personas, pero puede ser mortal para las macotas debido a que contiene teobromina, lo cual es un análogo de adrenalina, y es una sustancia que puede ser muy peligroso para la salud del animal y comprometer seriamente sus funciones vitales.
Se considera que tan poco como seis gramos por cada kilo de peso del animal puede causar un aumento de la contractilidad del corazón, actuando como un poderoso diurético produciendo deshidratación y afectando el sistema gastrointestinal causando diarrea y vómitos, además, produce úlceras en la mucosa gástrica lo cual afecta al sistema nervioso provocando convulsiones, y a veces, la muerte.
4. Leche y productos lácteos
Quizás tu abuela te ha dicho siempre “dale un poco de queso a tu perro y será tu amigo para siempre”, y razón tiene. Lo que probablemente no sabe tu abuela es que la gran mayoría de especies animales se vuelven intolerantes a la lactosa en cuanto abandonan la etapa de la lactancia materna.
La mayoría de los animales no tienen la enzima que es necesaria para disolver el azúcar de la leche, y esto puede provocar diarrea, vómitos y otros problemas estomacales.
5. Alcohol
El alcohol puede ser elevadamente tóxico y llegar a ser mortal. Todas las bebidas alcohólicas incluyen etanol, lo cual es venenoso para los perros. Si el perro bebe alcohol se pueden presentar síntomas como excitación, cambio en el comportamiento, depresión, jadeo excesivo, dificultad para respirar. Se podrán nerviosos y pueden atacar cosas, hiriéndose inclusive a sí mismos. El único líquido recomendado para los perros es el agua.
6. Cebolla y ajo
Como bien sabemos la cebolla y el ajo son sanísimos y buenos para la salud… pero, para la salud de los humanos.
Las cebollas, en cualquier forma (cocido, crudo o en polvo), suelen ser muy tóxicas para los perros. Poseen compuestos que pueden provocarle daños al sistema digestivo del animal, que es incapaz de digerirlos. Además, pueden llevar a una intoxicación. Los síntomas que el perro puede manifestar luego de la ingestión de cebolla y ajo son diarrea, vómitos, debilidad y reacciones alérgicas.
El consumo de cebolla también puede llevar a la anemia hemolítica en los perros.
7. Embutido y carnes saladas
Es domingo por las noches y te dan ganas de cocinar bajo mínimos, sacas un poco de jamón y un poco de longaniza, luego tu perro te pone ojitos de carnero degollado… y, te da tanta pena que le das un trozo.
Además de contener bastante grasa, también son muy saladas, lo cual puede causarle serios dolores de estómago u otras complicaciones.
8. Cafeína
Es muy extraño ver a una persona dándole café a su mascota, pero como hay mucha gente rara por el mundo no está demás mencionarlo.
El café contiene sustancias que estimulan el sistema nervioso central y al sistema cardíaco y en muy pocas horas puede provocar hiperactividad, vómitos taquicardias e inclusive la muerte.
9. Aguacates
A tu mascota no le conviene para nada comer aguacates, ya que todos los componentes son altamente tóxicos. La sustancia tóxica que figura en el aguate se le conoce como Persin. Los síntomas que se manifiestan son problemas respiratorios, la ampliación del abdomen y problemas cardíacos.
10. Pasas y uvas
Tan ricas que son y qué triste que sean malas para los animalitos. Su consumo puede conllevar a tus mascotas a sufrir problemas gastrointestinales severes, insuficiencia renal agua e inclusive la muerte. Según varios estudios, aproximadamente a 1 de cada 3 perros afecta de forma grave el consumo de uvas.
Sé responsable, usa medicamentos veterinarios…
Y hagamos un alto para hablar, principalmente, del paracetamol. Este fármaco es un veneno para nuestros perros. El envenenamiento con paracetamol en perros es producido debido a que el analgésico daña el hígado y los glóbulos rojos. Como consecuencia, un perro envenenado por paracetamol puede morir por necrosis hepática. Se considera que 150 miligramos de paracetamol por cada kilo del perro es la dosis letal, es decir, que dos comprimidos de paracetamol pueden matar a un perro.
La industria veterinaria ha avanzado y sigue avanzando con pasos agigantados. Muchas de las medicaciones de humanos poseen su versión veterinaria. Debes comprender que tu mascota no es una persona, por muy humano que te parezca. Su sistema inmunológico es totalmente distinto al tuyo, no intentes calcular la dosis que debes proporcionarle tendiendo sólo en cuenta su peso. Puedes consultar con algún veterinario con una simple llamada, no hace falta ni pedirle cita. Sólo una llamada puede llegar a salvar la vida a tu mascota.
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